De a poco, uno de los principales pesqueros de invierno
de la provincia recobra el atractivo que tuvo
hasta antes de las obras de mantenimiento
Hasta el comienzo de los trabajos de arreglo de las compuertas, el dique La Angostura, en El Mollar, brindaba no sólo satisfactorias jornadas de pesca de pejerreyes sino que se prodigaba con ejemplares de buen tamaño, en general. Luego del "vaciado" del embalse (dos veces) se mantuvieron los trabajos de resiembra por parte del personal de Piscicultura y hoy, con la cota más o menos normal, de a poco se recupera la fauna ictícola con capturas de medianos y chicos de porte aceptable.
Pruebas al canto... el fin de semana pasado, Adolfo Párraga, colaborador de NOAFishing, llegó temprano al dique y desafiando las bajas temperaturas se lanzó al espejo -junto con un amigo- a la altura de la "cola", en un gomón. Para para llegar al agua -contó- tuvieron que romper la placa de hielo que se había formada a lo largo de la costa.
A unos 100 metros del lugar de referencia, los pescadores probaron a un metro de profundidad sin resultados, pero al divisar los "borbollones" de un cardúmen comenzaron con las capturas. En esta última ocasión, tiraron a flote (entre 30 cm y un metro), encarnando con filet de mojarrón.
Párraga utilizó un equipo ultraliviano. Caña de grafito de 1,7 m, con reel Spinit 100 cargado con nylon del 0,16, boya "perita" de 20 mm y un sólo anzuelo Nº 7. El otro pescador usó un balancín con dos anzuelos Nº 7, con boya lapicera.
A las 13, aproximadamente,comenzó a soplar fuerte el viento y salieron a la orilla. Completaron la jornada de pesca y el cupo de ejemplares permitidos vadeando en la costa.
Fuente: Noa Fishing
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