De orilla o embarcado, el dique salteño
brinda posibilidades de capturas de Bogas y Bagres
de buen tamaño y, con una cuota de paciencia,
también de Dorados.
también de Dorados.
Cerca de la entrada del río Juramento, el grupo tentó desde la o rilla algunos bagres y la respuesta fue positiva. "bigotudos" de hasta un kilo consiguieron con filet de sábalo y tripa de polo, y l uego, embarcados, repitieron las capturas. Sin embargo, con filetes de pejerreyes consiguieron tentar a las bogas, que se prodigaron generosas en el pique pero algo reaceas a morder la carnada.
"Vicky", el guía, comentó que cuando el agua no corre con tanto caudal y un poco más clara, los dorados aparecen muy voraces y la pesca resulta entonces muy atractiva. En este sentido, recomendó tener en cuenta lo estipulado por el reglamento de pesca salteño que no permite la retención de ejemplares. Por lo tanto, hay que devolver los "amarillos" -igual que los sábalos- al agua.
Parte del reglamento dice textualmente: "La provincia de Salta cuenta con un cuerpo de inspectores encargados de velar por el cumplimiento de las normas vigentes para la pesca deportiva y asistir al pescador. Ante la verificación de violaciones a las normas vigentes, los inspectores deberán labrar un acta y secuestrar preventivamente los elementos involucrados en la infracción".
Fuente: NOA Fishing
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